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5 jul 2010

CONSUMÓ GRAN FRAUDE, FÉLIX GONZÁLEZ CANTO EN QUINTANA ROO


CANCÚN, Lunes 5 de Julio 2010.

CONSTE!
LA ELECCIÓN MÁS SUCIA

+ Funcionó la “estrategia” de Félix de espantar a los ciudadanos
+ A propósito, el IEQROO hizo que abrieran tarde las casillas
+ Bombardeo a celulares y mantas contra Julián Ricalde ¡pero ganó!

Por CARLOS CANTÓN ZETINA*
carlos_cantónz@hotmail.com

Fue la más sucia elección en la historia de Quintana Roo. El “agandalle” a lo bestia del PRI y… ¡aterrorizar a los ciudadanos para que no expresaran su voluntad soberana!.
Puntualmente, para infortunio de la democracia y de los quintanarroenses, se cumplieron los augurios de este periodista: el gobierno de Félix González Canto mostró crudamente su rostro autoritario y provocó la realización de “comicios del miedo” este domingo, donde mañas, truculencias del viejo priísmo y escandalosa utilización del aparato del Estado quedaron en evidencia.
Sin duda, el gobernador pasará a la posteridad como el personaje más tenebroso y antidemocrático, el que recurrió a los peores métodos para violentar la voluntad popular.
Con sus mil y una tortuosidades, por ejemplo las utilizadas para ahuyentar a la gente de las urnas, convierte a su delfín Roberto Borge Angulo en un gobernador deslegitimizado. Ya lo habíamos previsto también en este espacio periodístico: será un “gobernador chiquito”, como pequeña fue la votación a su favor.
Fue en el municipio de Benito Juárez (Cancún), donde se concentra casi la mitad de los electores y está el principal destino turístico del país, donde la maquinaria de don Félix se esmeró mayormente para consumar su fraude.
En plena jornada dominical, la mano negra gubernamental hizo aparecer mantas en contra de Julián Ricalde Magaña y otros candidatos opositores. Se les acusaba de pertenecer al “Cártel de Greg”, una nueva organización surgida de las mentes siniestras que asesoran al gobernador. ¡Qué intolerancia y afán de González Canto de hostigar a los contrincantes de su partido el PRI!. A pesar de eso, y mucho más, Ricalde triunfó, como también lo habíamos vaticinado, y gobernará a casi la mitad de los habitantes de Quintana Roo, para desgracia del gobernador y su sucesor. (El PRI perdió no sólo el ayuntamiento de Benito Juárez sino también el de Isla Mujeres, para el PAN, como lo habíamos previsto aquí). Pero se hizo hasta lo imposible por aniquilar al candidato opositor Ricalde:
En plena votación, hubo llamadas y mensajes intimidatorios, vía celulares, a 300.000 electores quintanarroenses. ¡Sólo el gobierno podría hacer tal monstruosidad, sólo él pudo obtener --ilegalmente-- la base de números telefónicos para invadir la privacidad de los ciudadanos!. Hubo un gran abstencionismo inducido por el aparato estatal, de la mano del PRI.
Como también lo habíamos anticipado en esta columna, el Instituto Electoral (Ieqroo), con el lacayo Jorge Manríquez Centeno a la cabeza, resultó ser el principal brazo ejecutor --no el único-- de González Canto para convertir en un auténtico cochinero la jornada que debía haber sido un ejemplo de civismo y de libre participación de los electores.
Incluso los medios oficialistas, como la televisión quintanarroense, dieron a conocer --y hasta lo criticaron-- el desgarriate propiciado por el instituto. “Muy desorganizado”, lo calificaron con benevolencia.
Pero como dice Andrés Manuel López Obrador: “el pueblo no es tonto… tontos son los que creen que es tonto”. Miles y miles de ciudadanos constataron, y se quejaron, del deliberado desbarajuste en el Ieqrooo. Ellos lo vieron, ellos lo sufrieron…
La estrategia deliberada del gobernador, con la complicidad del Ieqroo, fue efectiva: la apertura de casillas fue generalizadamente --y a propósito-- retrasada ¡hasta cuatro y cinco horas!. La razón: no llegaron los “funcionarios electorales”… o llegaron y se fueron. Miles de ciudadanos que acudieron a las 7 de la mañana, o antes, se fastidiaron y abandonaron las casillas, donde en teoría podían sufragar a partir de las 8.
Manríquez Centeno y los otros 6 consejeros del Ieqroo, igual de arrodillados ante el poder, había dicho la víspera que estaban integradas las mesas directivas de las casillas “al 100%”. Aunque a mediados de junio uno de esos consejeros había denunciado que 27% de los ciudadanos insaculados para desempeñarse como funcionarios electores había rechazado ese cargo. La conclusión es que nada hicieron para solucionar el problema. Y fue a propósito, porque al final muchos de esos “funcionarios” fueron sustituidos por militantes del PRI que ya estaban preparados para ello.
Y, en plena votación, el arrastrado Manríquez Centeno declaró ¡a la una de la tarde!, que estaban instaladas 94.6% de las 1.526 casillas electorales en el estado. Pero mintió, porque media hora antes, la perredista Alejandra Simental Franco, representante ante el Ieqroo, dijo que apenas 61% de las casillas estaban listas, y que el nivel más bajo de apertura se daba en Cancún: en el distrito XIII con 42.4%, y en el distrito XI con 49.6%. O sea, añadió, “ni el 50% de las 740 casillas en el municipio de Benito Juárez habían sido instaladas a las 10.30 de la mañana”. El prestigiado Diario de Yucatán publicó en su portal de internet que a la una de la tarde “se habían instalado menos del 80% de las casillas en el estado de Quintana Roo”.
Y Manríquez Centeno ¡ni la burla perdonó!. Después de la una de la tarde, con absoluto cinismo, dijo que en la instalación de casillas “el único incidente que prevaleció fue la ausencia de los presidentes de casillas (…) este problema se resolvió al incluir a gente que estaba en la cola para votar, de allí en fuera no tuvimos incidentes mayores”. Así, como si ese “incidente” no hubiera sido gravísimo.
Roberto Borge no se quedó atrás en eso de minimizar la inasistencia de funcionarios electorales. Del brazo del patriarca y jefe político de Cozumel, Nassim Joaquín y su hijo Pedro Joaquín Coldwell --con quienes “coincidió” en una casilla de la isla--, el candidato priísta declaró casi a la 1 de la tarde que todo iba bien, “con unos retrasos nada más” en la instalación de casillas. “Nada más” eso…
Sin embargo, quien se llevó las palmas en ese teatro del cinismo fue González Canto al afirmar que la ausencia de funcionarios electorales “es normal (…) algunas llamadas telefónicas, no sé si de la delincuencia o de los partidos, y por eso no acudieron”. Y dijo --¡en plena votación empañada por el Ieqroo y los ataques en celulares-- que “no hay obstáculos para que participen los ciudadanos”.
Peor aún, el gobernador no tuvo empacho en decir que el abstencionismo: “… es típico en las elecciones locales… en las federales, en las presidenciales, votan más”. O sea ¡hay que esperar que venga los comicios para elegir Presidente de la República para que retorne la democracia a Quintana Roo!. Don Félix cree que vive en Alicia en el País de las Maravillas, pues habló de que “el estado ha llegado a una madurez democrática”.
Y hubo más irregularidades del Ieqroo; aquí algunas:
1.- El material electoral (boletas, mamparas, actas de cómputo y escrutinio, etc.) fue entregado tardíamente y también de manera deliberada, a las mesas directivas en gran número de casillas. El colmo fue que, en algunos casos, ese material estaba incompleto.
2.- El instituto publicó en diarios locales –el mismo domingo-- una relación de la ubicación e integración de las casillas, pletórica de “errores”, en direcciones y nombres de funcionarios. Con toda intención de confundir a los votantes, como ocurrió.
3.- Solapó encuestas tendenciosas al pie de urnas, como la de Gabinete de Comunicación Estratégica (GCE), en beneficio del PRI y sus candidatos. Es que esa empresa es propiedad del corrupto priísta Liévano Sáenz, ex secretario particular de Ernesto Zedillo en Los Pinos.
4.- Permitió un exceso de representantes del PRI en las mesas receptoras del voto. “Violó claramente el reglamento”, denunció Sergio Bolio Rosado, dirigente estatal del PAN. A la queja se sumó la dirigencia del PRD.
5.- No atendió querellas de suma gravedad como la de Alicia Ricalde Magaña, candidata del PAN a la gubernatura, de que en Isla Mujeres y en Cancún estaba operando un ejército de “mapaches” electorales provenientes de Yucatán, incluso gente del gobierno de la priísta Ivonne Ortega Pacheco. Esta ilegal intromisión fue admitida por la abanderada tricolor a la alcaldía de Cancún, Guadalupe Novelo Espadas. “Sí, contamos con el apoyo de activistas priístas no sólo de Yucatán sino de otras partes del país, para que ganemos”, dijo con desfachatez.
¡Más suciedad del Ieqroo, imposible!...
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ALZA LA VOZ COPARMEX.- El fracaso --deliberado-- del Ieqroo este 4 de julio, lo documentó un respetable personaje del sector privado en Quintana Roo: Hernán Cordero Galindo, presidente de la Coparmex. “Hay un completo retroceso en la actuación del instituto, que está para servir al partido que está en el gobierno (…) se ha desciudadanizado y así ya no es confiable, no sirve (…) el propósito del Ieqroo es disminuir la participación ciudadana en los procesos electorales, y por eso el abstencionismo se incrementará en al menos 10 puntos con respecto a comicios anteriores”.
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*Carlos Cantón Zetina es un periodista tabasqueño con una vasta trayectoria profesional de 45 años. Fue reportero y Jefe de Información del diario Excélsior y director general de las revistas de circulación nacional Quehacer Político, Polémica y Huellas.